Somos Atecalsa, la empresa líder en reparación de calderas en Madrid. Todas las intervenciones tienen garantía de 3 meses.
Nuestro call center, gestionado por 16 agentes y dotado con terminales de última generación, te atenderá de forma ágil y eficaz en horario de 8:00 a 20:00 de lunes a viernes.
Nuestros técnicos de calderas de gasoil y gas están siempre en continua formación. Por eso, te ofrecerán soluciones eficaces a los problemas de funcionamiento de su caldera o calentador.
Un técnico en calderas estará siempre disponible para ti en Madrid. Contamos con servicio de reparaciones en sábados, domingos y festivos en atención de 9:00 a 13:00. Consultar excepciones.
Flexibilidad en citas para que no pierdas tu valioso tiempo.
Te ofrecemos soluciones eficaces.
Cumplimos en todo momento con la legislación vigente, garantizado mediante las autorizaciones y certificados obligatorios.
Somos una de las mejores empresas en Madrid de reparación de calderas de gas. Desde 1978 hemos superado los 2.500.000 de intervenciones con un alto grado de satisfacción por parte de nuestros clientes.
Una caldera de gas puede presentar varios problemas frecuentes, entre los que destacan los problemas de encendido, de combustible, de presión de agua, de rendimiento, y en menor medida de seguridad.
En este caso, es posible que se trate de un problema eléctrico. Comprueba que la caldera está conectada a la corriente, que el fusible no esté desactivado y que la alimentación eléctrica esté correctamente conectada. Si el problema persiste, puede tratarse de una avería en el termostato o en la bomba de circulación. Por tanto, es recomendable que un técnico cualificado revise la caldera para detectar el problema y realizar los ajustes necesarios.
Cuando esto ocurre, debemos comprobar una serie de cosas. En primer lugar, comprobaremos que la caldera esté conectada a una toma de corriente eléctrica. Hay que asegurarse de que la toma de corriente eléctrica esté activada.
En segundo lugar, comprobaremos si hay algún fallo en el relé de la caldera. Un relé defectuoso puede evitar que el quemador se encienda.
En tercer lugar, verificaremos si hay alguna fuga de gas. Si hay una fuga, la caldera no se encenderá para evitar una explosión.
Finalmente, comprobamos el termostato de la caldera. Si el termostato no está funcionando correctamente, la caldera no se encenderá. Si el termostato está defectuoso, deberemos reemplazarlo.
La caldera se apaga y se enciende para regular la temperatura del agua y mantenerla en un nivel seguro para el sistema de calefacción. Esto se realiza mediante un termostato y una válvula de control de temperatura. El termostato detecta cuando la temperatura del agua comienza a bajar y enciende la caldera para calentar el agua. Cuando la temperatura alcanza el nivel deseado, el termostato apaga la caldera para evitar que la temperatura suba demasiado. Esto se repite constantemente para mantener la temperatura del agua dentro de los límites seguros.
En este caso, es probable que la caldera no esté funcionando correctamente. Primero, recomendamos verificar que el termostato esté ajustado correctamente y que el suministro de agua esté abierto. Si esto no funciona, puede que la caldera tenga un problema técnico y necesite ser reparada o reemplazada.
Es posible que la caldera tenga un problema mecánico, como una fuga de aire, una obstrucción en la tubería, una resistencia defectuosa o una válvula de seguridad averiada. Es posible que también necesite una limpieza o una calibración. Si el problema persiste, se recomienda buscar la ayuda de un profesional calificado.
Es posible que la caldera tenga una avería o esté sufriendo algún tipo de problema técnico. En estos casos, lo mejor sería contactar con un técnico especializado para que la revise y determine la causa exacta de la avería.
Si la caldera no se enciende, puede ser debido a una variedad de problemas. Primero, debes asegurarte de que la unidad esté conectada a la alimentación eléctrica. Si esto no es el problema, entonces sería recomendable comprobar la válvula de gas para asegurarse de que esté abierta y que la presión de gas esté a un nivel apropiado. Después de eso, también sería útil comprobar el encendido de la caldera para asegurarse de que está encendido y que los ajustes estén correctos. Si el problema persiste, es recomendable contactar a un técnico cualificado para verificar el sistema y diagnosticar el problema.
Si la caldera se enciende sola, es posible que tenga una fuga de gas en la línea de combustible. Esto puede ser muy peligroso y debe solucionarse inmediatamente. Por lo tanto, es recomendable que contactes con un técnico especializado para que revise y comprobar la instalación de la caldera para detectar una posible fuga de gas.
Una caldera de gasoil puede no arrancar por varias razones. Estas incluyen una falta de combustible, combustible sucio, filtro de combustible obstruido, baja presión de aceite, control de temperatura defectuoso, baja presión de combustible, fallo electrónico, fallo de la bomba de combustible, fallo del motor eléctrico, fallo del sensor de combustible, etc. La mejor manera de averiguar la causa del problema es realizar una revisión completa de la caldera para identificar el problema y solucionarlo.
El precio para arreglar una caldera de gas depende de varios factores, como la marca, el modelo, la complejidad de la reparación, el costo de las piezas y los honorarios del profesional. Por lo tanto, el precio puede variar mucho. Desde Atecalsa te ofrecemos el mejor precio garantizado.
No, no es posible desgravar la reparación de una caldera. Esta no se considera un gasto deducible para el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Sin lugar a dudas, Atecalsa es la mejor empresa para reparación de calderas en Alcobendas. ¡No lo dudes! Nuestros técnicos son profesionales con años de experiencia, los cuales solucionarán tus problemas con cualquier tipo de caldera de manera rápida y con garantías.